El Cursillo De Cristiandad es una experiencia de profundización en la fe católica, con el propósito de que los seglares tomen conciencia de su realidad de bautizados, fortaleciendo no sólo a la Iglesia, sino a todas las áreas y actividades del mundo, en las cuales los bautizados comprometidos aportarán sus valores cristianos.
Un cursillo no es un retiro, aunque para hacerlo es preciso retirarse por tres días de los quehaceres diarios.
Por eso, a diferencia de los retiros, que pueden hacerse varias veces, el cursillo se hace una sola vez en la vida, pues sus enseñanzas básicas no cambian.
El Movimiento Cursillo de Cristiandad (MCC) es un "instrumento pastoral de la Iglesia" que pretende que esas personas que hicieron el Cursillo inicien o aceleren el proceso de su conversión a fin de que asuman su responsabilidad de ser "fermento de Cristianismo" en los ambientes del mundo en que viven.